La afición de contar historias...

 


Por nada cambiaría las aficiones de mi vida, de sobra sé que el tiempo no alcanzará para triunfar en todo a lo que me dedico, leer, escribir, dibujar, pintar, programar, enseñar, de sobra también sé que cada una de ellas necesitan una vida entera para desarrollarla a plenitud.

Desde siempre tuve la sensación de poder contar historias, hasta trabajé en un periódico para aprender a narrar hechos, luego me hice profesor de historia para aprender cómo contarlos y ahora estoy en el momento de poderlos expresar.

Aunque si debo ser sincero, maldito si sé por dónde o cómo empezar a contar.



También se puede ver

Ha sido un largo camino